Este fin de semana fuimos de excursión. Aprovechando este veranillo de San Martín que estamos disfrutando y teniendo en cuenta que el otoño es la época ideal para hacer rutas y descubrir paisajes nos fuimos a ver la fervenza do Toxa, la cascada del río Toxa, un espacio natural extraordinario y que está muy cerquita de Santiago, en el concello de Silleda en la provincia de Pontevedra.
El enclave forma parte del proyecto europeo Red Natura y es Lugar de Importancia Comunitaria. A medida que vas bajando por los caminos que conducen a la cascada, la naturaleza rocosa y más arisca se va transformando en un bosque atlántico perfectamente conservado en el que los robles milenarios se acercan a imponentes castaños y se entralazan con avellanos, sauces y alcornoques. A tus pies las rocas gigantescas de pizarra con musgos y líquenes van marcando un camino que acompaña al río en su descenso. El valle se convierte en una cápsula natural perfecta que te transporta a un paisaje salvaje y primitivo.
Como podéis ver en las fotos no es necesario un equipo especial de trekking o de senderismo para acceder a la cascada directamente. Como mucho un chubasquero si os queréis acercar a ella, sobre todo en otoño e invierno.
Algo más necesitareis si os apetece conocer mejor el entorno natural y artístico. Para ello existen varias rutas con distintos grados de dificultad, longitudes y duraciones. A algunas de ellas podéis llevar incluso a los más peques de la casa. ¡Les parecerá estar dentro de un paisaje de Jurassic Park o del Señor de los Anillos!!
Aquí os dejo una pequeña selección de fotos de nuestra mini-ruta:
Como podéis ver, es un sitio espectacular que merece no una sino muchas visitas.
Para más información sobre la manera de acceder a la cascada o las diferentes rutas os recomiendo la página de turismo del concello de Silleda.